lunes, 28 de abril de 2014

Trabajo: actividad final

En esta sesión, Tomás nos ha explicado el último trabajo, que consiste en el diseño de una actividad grupal mediante la que enseñemos a los niños/as alguno de los contenidos musicales aprendidos durante el curso.

ACTIVIDAD FINAL:

Objetivos:

-. Desarrollar el ritmo a través de la percusión.

-. Mejorar la coordinación y el control motriz mediante el ritmo.

Contenidos:

-. El ritmo.

Materiales:

-. Vasos de plástico o cartón.

Desarrollo de la actividad:

Grupo destinatario: alumnos/as de 5 a 6 años.

Fase de iniciación:

Nos sentamos en círculo y las coordinadoras de la actividad comienzan a hacer un ritmo (3 semicorcheas, 1 negra) a través de percusión corporal sin decir nada a los alumnos. Con esto pretendemos que los niños/as imiten nuestros movimientos.

Fase de desarrollo:

Una vez que los niños hayan aprendido el ritmo marcado introduciremos un vaso de plástico, cambiando el último golpe por el sonido del vaso. Repetiremos el ritmo varias veces hasta que los niños aprendan a hacerlo con el vaso. Después, una vez interiorizado esto, introduciremos el intercambio de vasos entre los compañeros, de manera que el último golpe lo den pasando el vaso al compañero de su derecha.

Fase final:

Por último, una vez hecho esto, introduciremos una melodía o canción a la que incorporaremos la base del ritmo practicada anteriormente.



lunes, 7 de abril de 2014

Actividad de relajación

Desarrollo de la actividad:

En esta sesión hemos realizado una actividad totalmente diferente a las propuestas en sesiones anteriores. Hemos realizado una actividad de relajación en grupo.

Para ello, hemos ambientado el aula con una varita de incienso. Después, hemos divido la clase en dos grupos: la mitad de la clase estaba sentada en círculo en las sillas con los ojos cerrados, mientras que la otra mitad estábamos de pie. Al ritmo de la música zen, los que estábamos de pie hemos hecho "caricias" en la espalda, durante 10 minutos, a los que estaban sentados. Cuando no les hacíamos caricias girábamos detrás de ellos, de modo que cambiábamos de posición continuamente. 

Una vez terminado el ejercicio nuestros compañeros, bastante relajados, dieron su opinión sobre la actividad, diciendo cómo se habían sentido. Finalmente, los que estábamos de pie nos intercambiamos el puesto con los que estaban sentados. Repitieron la actividad con nosotros durante otros 10 minutos. Después, como habían hecho ellos, dimos nuestra opinión sobre la actividad.

La actividad es increíble para relajarse. Sin embargo, en ciertos momentos, alguno de nosotros hemos sentido agobio, puesto que al tener los ojos cerrados durante tanto tiempo no sabíamos lo que ocurría realmente en algunas situaciones.

Utilización de la música: 

La música que utilicemos en este tipo de actividades no debe ser ni tener ningún tipo de referente para nosotros, puesto que, por el contrario, sería la propia música la que distraería nuestra atención de la sensación de relajación.

Ejemplo de música relajante: